Con un título de diseñador gráfico , Iván fue por más: acaba de recibirse de antropólogo en la Universidad Nacional de Córdoba. Claro que ésto no sería noticia sino fuera que su tesis está hecha en formato de historieta.
Por eso, nos pusimos en contacto con Ivan Zigarán, quien nos contó cómo surgió esta idea y el desarrollo de una tesis verdaderamente disruptiva.
Iván con su tesis en formato de cómic |
Betina Pascar: ¿Cuáles fueron tus fundamentos al elegir el formato del comic para tu tesis? ¿Qué te motivó? ¿No te dio miedo de que te reprobaran?
Iván Zigarán: Al principio la tesis iba a ser en formato tradicional, escrito. Al momento de la escritura, surgió la idea de ilustrar algunas situaciones del campo en formato historieta, a partir de mi trayectoria como dibujante. Había hecho un par de historietas para artículos de arqueología (Con Roberto Pellini, de Brasil, y Andrés Zarankin, argentino), y de ahí había quedado picando la idea, que inicialmente era incluirlo como un complemento descriptivo más que nada, que acompañe el texto, pero a mi directora (de tesis), la doctora María Bernarda Marconetto, le gustó mucho la idea y de a poco fue cada vez "ganando más terreno", al punto que en un momento notamos que los bloques de texto cortaban la fluidez de la lectura. Es decir, que restaban más de lo que sumaban. Vimos que la historieta daba herramientas y recursos para incluir todo lo necesario sólo que de una forma distinta. Así que decidimos directamente hacerla todo en historieta. Hay algunos fragmentos de texto en off pero siempre acompañados de dibujo, nos dimos cuenta de la potencialidad de ese cruce de caminos, que iba a ser un antecedente tanto para la antropología como para la historieta. Era complejo, porque implicó bastante trabajo, y no había muchas fórmulas sobre las que apoyarse. Corrí el riesgo de que me desaprobaran pero consideramos que había suficientes argumentos para defender la decisión. En este sentido, el apoyo de mi directora fue muy importante: ella estaba más entusiasmada que yo.
BP: ¿En algún momento, mientras investigabas y producías el texto, pensaste en abandonar?
IZ: Nunca pensé en abandonar. Sí en un momento me preocupó el tiempo que me iba a llevar. Lo vi muy largo, y el proceso era bastante cansador mentalmente. Tenía que ir buscando anotaciones de campo, registros fotográficos, textos teóricos. Y el hilo se me iba yendo todo el tiempo, por ahí sentía que quedaba medio a la deriva. Pero en un momento fue cerrando por suerte, y una vez que más o menos pude visualizarlo entero todo se acomodó.
BP: ¿La intención era publicar esta investigación posteriormente?
IZ: No, no lo hice con la idea de publicar, mi único horizonte era recibirme. Tampoco me imaginé que iba a tener tanta repercusión.
¿Tesis o cómic? (Foto gentileza: Vos) |
BP: ¿En qué proyectos de historietas estás trabajando ahora?
IZ: Actualmente estoy terminando de ilustrar un libro de aventuras juvenil, escrito por Jo Rivadulla, que combina prosa con comic. Tengo también por terminar una historieta personal que trata del encuentro de una comunidad andina con conquistadores españoles. Y también está dando vueltas la idea de un segundo libro de "Nahuel el niño-jaguar".
BP: ¿Qué te hizo seguir una carrera y luego otra si vos realmente querías dibujar?
IZ: Diseño gráfico lo estudié por cuestiones laborales, me dio muchas herramientas que creo que suman mucho para el dibujo. A Antropología me metí por cierta curiosidad intelectual, para explorar, para nutrirme. Había viajado por Sudamérica y me pareció que había mucho por contar y dibujar, sentí que la antropología podía darme ciertos recursos. Cuando arranqué la carrera me enamoró, me sorprende a mí mismo haberla terminado. Igual nunca dejé de considerarme dibujante.
BP: Sos el primer licenciado que hizo su tesis en este lenguaje. ¿Crées que a partir de ahora harás escuela y otros seguirán tu camino?
IZ: Creo que la tesis tocó algún nervio sensible en la academia. Hubo mucho interés y me parece que eso habla de cierta necesidad de apertura del lenguaje académico. No sé si vendrán más en el corto plazo, ni tampoco me pongo en una cruzada contra el lenguaje académico. Sí creo que está bueno reivindicar a la historieta como un lenguaje válido para producir y transmitir conocimiento, y con mucho potencial por explorar.
BP: ¿Ahora vas a trabajar como antropólogo?
IZ: No, la idea es poder desarrollar la antropología desde el dibujo y la historieta, y seguír haciendo puentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario